El relicario de la «Camisita» data de la segunda mitad del siglo XIV y se conserva en su formato original. Según la bibliografía, en su interior guarda «la camisa de Jesucristo, la cual la Virgen María hizo sin costura». A finales del siglo XIV, María de Luna, esposa de Martín el Humano, empeñó objetos de valor, incluyendo la capilla, con el fin de financiar al ejército en Sicilia.
El relicario es muy detallado en su descripción, y se mencionan los materiales de la caja, que incluyen cuero negro y madera de ciprés. La pieza estaba hecha de oro, aunque el material varía según los documentos consultados. El pie del relicario tiene seis esmaltes con los escudos de la Corona de Aragón y otros tres del conde de Barcelona.
La reliquia sufrió modificaciones considerables en la primera mitad del siglo XVII, y se creó una custodia en plata para albergarla. El promotor de la obra fue el Arcediano Mayor y Canónigo Gerónimo Frigola, quien también otorgó al relicario la fiesta del día de la Circuncisión del Señor, el 14 de diciembre, acompañada de la misa correspondiente.
El relicario que contenía la reliquia no tuvo la misma suerte que las andas procesionales durante la Guerra de la Independencia (1809 y 1813), cuando se fundieron algunos objetos valiosos en Mallorca. Sin embargo, el relicario original del siglo XIV, que contenía la reliquia, no sufrió daño alguno en su periplo por el archipiélago balear.
La reliquia en sí es conocida como la «Camisita del Señor», y se cree que es un fragmento de la túnica de seda que Jesús llevó en Egipto. Se encuentra en un tubo de cristal con guarniciones de plata sobredorada, admirablemente trabajadas, sostenido por un pie del mismo metal de estructura gótica.
Camisita del Señor.la camisa de Jesucristo Camisita del Señor.—Con este nombre es conocido un pedazo de túnica de seda, la que tal vez fué hecha en Egipto, y allí usó el divino Jesús. Hállase en un tubo de cristal, con guarniciones de plata sobredorada, admirablemente trabajadas, sostenido por un pie del mismo metal de gótica estructura, donde se ven esmaltados tres escudos con las armas de Aragón y tres con las de Sicilia. La entregó á esta Catedral el rey D. Alfonso V, juntamente con otras reliquias, y en el inventario que entonces se hizo se describe así el relicario: Un cano de cristal engastáis los caps en un cercle de or lo peu lot de or ab sis smalts ab les armes de Arago y de Sent Antoni e dins lo dit cano es la camisa de Jhu xpt. la qual la Verge Maria feu sens costura lo qual cano es sedal un costal e la cubería de cristal un poc trencada. El tubo de cristal que hoy tiene es el mismo que aquí se indica. El arcediano mayor D. Jerónimo Frígola instituyó en honor de esta sagrada reliquia, en 14 de Diciembre de 1691, una dobla para el día de la Circuncisión, y el mismo, en 21 de Enero de 1696, un rosario solemne con sermón. La Catedral de Valencia. José Sanchís y Sirera 1909
El relicario de la «Camisita» es un objeto de gran importancia histórica y religiosa, que se remonta a la segunda mitad del siglo XIV. Según la bibliografía, en su interior guarda «la camisa de Jesucristo, la cual la Virgen María hizo sin costura». La pieza ha sido objeto de numerosas modificaciones a lo largo de los siglos, lo que ha llevado a la aparición de diferentes versiones en los documentos consultados. El relicario original estaba elaborado principalmente en oro, aunque el material podría variar según las fuentes. El pie del relicario presenta seis esmaltes con los escudos de la Corona de Aragón y otros tres del conde de Barcelona. En la descripción original, se menciona que la Camisita se encontraba en el interior de un cilindro de cristal, cerrado en la parte superior con una semiesfera decorada con un balaje y dos perlas grandes, que actualmente no se conservan. Durante la primera mitad del siglo XVII, se observaron cambios significativos en la reliquia y, por consiguiente, en el relicario. Se creó una nueva custodia en plata para albergarla, que incluía una decoración barroca típica y cuatro ángeles en la base. Esta custodia fue encargada por el Arcediano Mayor y Canónigo Gerónimo Frigola, quien también instituyó una festividad en honor a la reliquia el día de la Circuncisión del Señor, el 14 de diciembre, acompañada de la misa correspondiente. Desafortunadamente, durante la Guerra de la Independencia (1809 y 1813), el relicario que contenía la reliquia no tuvo la misma suerte que las andas procesionales, y algunos objetos valiosos fueron fundidos en Mallorca. Tras la pérdida del contenedor de plata, la reliquia fue depositada nuevamente en el relicario original del siglo XIV, cuyo valor intrínseco lo había salvaguardado desde el año 1691. La reliquia en sí, conocida como la «Camisita del Señor», es un fragmento de la túnica de seda que, según la tradición, Jesús llevó en Egipto. Se encuentra en un tubo de cristal con guarniciones de plata sobredorada, sostenido por un pie del mismo metal de estructura gótica. A lo largo de los siglos, el relicario y la reliquia han sido objeto de diversas descripciones e investigaciones, lo que refleja su importancia histórica y religiosa. El uso de cilindros o tubos de cristal para albergar reliquias de gran importancia era común en la época medieval, ya que permitía una clara visibilidad y exposición de las mismas, acercando al devoto en su experiencia. Otros ejemplos de esta práctica se encuentran en la Catedral de Valencia, donde se conservan relicarios procedentes del Tesoro Real. A pesar de las vicisitudes que ha experimentado a lo largo de los siglos, el relicario de la «Camisita» sigue siendo un objeto de gran valor histórico y religioso, y su conservación en su formato original es un testimonio de la importancia que se le ha atribuido a lo largo de la historia.