La Covacha de Llatas es un fascinante yacimiento arqueológico ubicado en Andilla, Valencia, que nos transporta a un período crucial de la historia humana: la transición entre el Epipaleolítico y el Neolítico. Este yacimiento ha sido estudiado y excavado por el Servicio de Investigación Prehistórica (S.I.P.), cuyos hallazgos se encuentran actualmente expuestos en el Museu de Prehistòria de València.
Situada en el límite entre Andilla y Villar del Arzobispo, la Covacha de Llatas se encuentra en las proximidades del barranco del Salobral. Su ubicación estratégica en la falda del pequeño cerro Puntal de Cambra le confiere un encanto especial. La covacha en sí tiene forma de pirámide triangular, con una base de 3.5 metros, una altura de 1.5 metros y una profundidad de 3.6 metros.
Fue en 1948 cuando Vicente Llatas Burgos, maestro en Villar del Arzobispo y Cronista Oficial de la Villa, descubrió este valioso yacimiento. Durante una excavación dirigida por José Alcácer Grau, Llatas encontró la covacha y rápidamente se puso en contacto con el S.I.P. para llevar a cabo su excavación. Desde entonces, se han realizado diversos estudios sobre los restos encontrados en el lugar.
Entre los hallazgos más destacados se encuentran restos de industria lítica, fragmentos cerámicos, restos óseos de fauna y moluscos, e incluso indicios de un posible enterramiento. Se han descubierto un total de 5.331 piezas de sílex y 20 de cuarcita, siendo las hojitas de dorso rebajado y los raspadores las tipologías más comunes. Los restos cerámicos, aunque muy fragmentados, muestran una cocción imperfecta y desigual, y se han identificado algunas decoraciones interesantes. También se han encontrado restos óseos de animales de tamaño pequeño, como herbívoros, roedores y aves, así como conchas malacológicas perforadas, utilizadas como elementos decorativos.
El estudio de la Covacha de Llatas ha sido fundamental para comprender la neolitización en la fachada mediterránea peninsular. Este yacimiento nos revela cómo se produjo la transición de las sociedades cazadoras-recolectoras del Epipaleolítico a las sociedades productoras del Neolítico. Gracias a sus materiales, hemos obtenido valiosa información sobre la evolución cultural y tecnológica de aquel tiempo.
A lo largo del siglo XX, la interpretación de la Covacha de Llatas ha evolucionado, descartando las relaciones con la cultura Capsiense del norte de África y estableciendo su adscripción al Mesolítico Reciente Geométrico, específicamente a las fases finales. Actualmente, este yacimiento es reconocido como un importante testimonio de la transición hacia el Neolítico en la región valenciana.
La Covacha de Llatas es un tesoro arqueológico que nos permite adentrarnos en el pasado y comprender la historia de nuestros antepasados. Su estudio continúa proporcionando valiosos conocimientos sobre la vida en el Epipaleolítico y la transición hacia el Neolítico en Valencia.