La fiesta del “Misterio de los Corporales”, recuerda la aparición en Llutxent, el 24 de febrero de 1239, de varias formas consagradas ensangrentadas, tras un ataque musulmán a las tropas del rey Jaime I mientras participaban en una misa. Esta fecha se recuperó gracias a D. José Aparicio, cura que se instaló en el municipio y que puso todo su empeño en recuperar dicho acontecimiento tan importante para la historia de Llutxent (Vid Díaz de Rábago Canet et al. 1989: 24).
Desde el año 2008, tras la jornada eucarística, se inicia una peregrinación de distintos voluntarios que salen desde Llutxent hacia Daroca para recordar el trayecto que realizaron los Sagrados Corporales en el mulo. Esta ruta de 340 kilómetros se realiza en 12 días siguiendo la tradición y el mismo recorrido que realizaron las sagradas formas.. Este acontecimiento es venerado cada año por una multitud de personas en pueblos y comarcas vecinas a Llutxent, llegando a recibir visitantes de otras provincias de la Comunidad Valenciana (España), principalmente de los pueblos hermanados por el Misterio
Este milagro eucarístico fue uno de los que impulsó al Papa Urbano IV a instituir en 1264 la fiesta de Corpus Christi en la Iglesia Universal, mediante la Bula “Transiturus de hoc mundo”.
La localidad valenciana de Llutxent la fiesta del “Misterio de los Corporales
Llutxent es una de las seis localidades de la diócesis de Valencia en las que tuvieron lugar distintos milagros eucarísticos.
Un ataque enemigo suspendió la misa y el capellán ocultó las formas
La fiesta del “Misterio de los Corporales”, recuerda la aparición en Llutxent, el 24 de febrero de 1239, de varias formas consagradas ensangrentadas, tras un ataque musulmán a las tropas del rey Jaime I cuando el capellán de las tropas, Mateo Martínez, natural de Daroca, celebraba la misa y había consagrado ya varias formas destinadas a la comunión.
El ataque obligó a suspender la misa y el capellán ocultó las formas, que ya estaban consagradas, en un pedregal del monte, envueltas en los corporales. Rechazado el ataque del que salieron los cristianos victoriosos, y pidieron al sacerdote que les diera la comunión en acción de gracias.
El capellán fue al lugar donde las había escondido y se encontró las seis hostias empapadas en sangre y pegadas a los corporales. Los comandantes tomaron este hecho como una señal divina e hicieron que el sacerdote levantara el corporal, manchado de sangre, como un estandarte. Hoy se veneran en la localidad zaragozana de Daroca, de donde era natural el capellán.
Como hemos comentado el origen del Milagro se remonta a poco después de la conquista de Valencia. El Rey Jaime I se desplaza a Montpelier, y durante su periodo de ausencia se producen diversos incidentes que se traducen en las batallas de los cristianos contra los moros (Canet Canet 1988: 15). En una de estas batallas, el ejército del rey cristiano celebró la eucaristía, momento que aprovecharon los musulmanes asentados en el Castillo del Xio para lanzar un ataque. El sacerdote que oficiaba la misa -Mosén Mateo Martínez- dobló los corporales que contenían las formas consagradas y las guardó debajo de una piedra. Tras ser rechazado el ataque, se decidió continuar la celebración de la eucaristía, pero al recuperar el sacerdote los corporales descubrió que las formas estaban ensangrentadas. Los presentes, reclamaban el derecho a ser depositarias del Misterio, por lo que decidieron colocar el sagrado prodigio sobre un mulo y allí donde parase el animal, se quedaría definitivamente el Santísimo Misterio (ver Bérchez, 2009:7).
El animal caminó durante 13 días y durante el trayecto se sucedieron diversos milagros, como el de Pobla Llarga, en el que se dice que un hombre paralítico había pedido que le dejaran junto al camino por donde había de pasar el cortejo. Al estar cerca de los corporales gritó “¡Misericordia!” y, entonces ante con la admiración de todos, el paralítico se levantó curado y fue corriendo al pueblo contando la maravilla y dando gracias a Dios (Vid. Orrios de la Torre 1993:50 y 2001:30). Finalmente se desplomó en la ciudad de Daroca (Zaragoza, España) (Tello de Meneses 2001:10). Años después, por encargo de don Juan II, fue construida la hermosa capilla donde se guardan las Sagradas Formas. Una joya gótica que destaca por sus relieves con escenas bíblicas y figuras policromadas, siendo toda una obra de arte que guarda el divino Misterio. Actualmente se veneran en una artística arqueta regalada por Pedro IV el Ceremonioso y cincelada por el artista Pedro Moragues.
Los sagrados corporales han sido visitados a lo largo de los siglos por reyes, príncipes, prelados, hombres ilustres y miles y miles de fervientes cristianos que han llorado de emoción cuando al abrirse las puertas del tabernáculo aparecen las seis formas ensangrentadas -todavía incorruptas y bien
visibles aunque con el lógico deterioro de los tiempos-. Sin embargo, respecto a la constancia documental del Milagro hay una cierta oscuridad, siendo la tradición y el testimonio oral la primera fuente histórica de la que se tiene noticia.
Muchos autores se extrañan que un suceso de estas dimensiones no se cite en la Crónica del Rey Don Jaime. Se explica sencillamente, porque la Crónica sólo se ocupa de los acontecimientos que ocurren en torno al rey. En esos días que el milagro sucede, don Jaime está en Montpelier; la Crónica cita a Pere de Alcalá y a los caballeros que fueron a liberarlo y al propio Entenza, aunque existe un malentendido por parte de algunos historiadores al afirmar que el rey don Jaime había hecho donación de la villa y castillo de Chiva a don Berenguer de Entenza, de ahí el interés del general por liberarla. El mismo Chabás (1981: 14) hace esta afirmación en un estudio que realizó sobre el milagro. Pero durante el tiempo que ocurre el Milagro de los corporales -febrero de 1239- don Berenguer de Entenza ya era señor de la villa y castillo de Chiva, así como de Pedralva y Mora.
Desde Jaime I, la mayoría de los reyes de España han adorado los Santos Corporales (Canellas López 1988:5; Canet Canet 1990:32). Las sagradas formas se sacan en procesión todos los años enel día de Corpus Christi en una artística carroza hasta el lugar llamado “La torreta” donde se muestran a los millares de peregrinos que llegan hasta Daroca para contemplar de cerca el Santísimo Misterio (Mañas, 2006:24).
Desde finales del siglo XIV, la basílica o devota de los corporales de Llutxent, como se la llamaba, fue lugar de peregrinaciones. En una escritura de poder otorgada por el rector de la parroquia y canónigo de Valencia don Bernardo Carsí se autorizó el 8 de julio de 1400 a Felipe Tudela, presbítero, Domingo Torrigo, notario y Bartolomé Pérez, de mayor edad, vecinos todos de la ciudad de Xàtiva, para que puedan recoger limosnas en iglesias, villas y lugares de la diócesis para la construcción de un aljibe en la capilla de Corpus Christi de la parroquia de Llutxent con el objeto de reunir y retener las aguas de lluvia para que pudiesen beber de ella los que visitasen la capilla en peregrinación o devoción.
LA RUTA DE LOS SAGRADOS CORPORALES DE LLUTXENT
La ruta no está señalizada como tal, sino que los peregrinos recorren por la carretera nacional N-234 -paralela a la autovía A-23- por lo tanto no está muy transitada excepto en el tramo desde Segorbe hasta Teruel (etapas de la 5 a la 7) en dónde circulan por la Vía verde, Ojos Negros II, antiguo trazado ferroviario destinado al uso para caminantes y cicloturistas. Se trata de una ruta con un total de aproximadamente 340 kilómetros, 76.30 horas de camino en 12 días, saliendo el 24 de Febrero (día en que ocurrió el Milagro) y llegando a Daroca el 7 de Marzo (día en que llegó la mula con los Sagrados Corporales). La ruta, se divide en doce etapas (Figura 3) que son fiel reflejo de las que realizó la mula, por lo que coincide con el recorrido de la ruta histórica.
ETAPA 1; Llutxent-Alzira; 35 Km. ETAPA 2; Alzira-Turis; 38 Km. ETAPA 3; Turís-Lliria; 36 Km. ETAPA 4; Lliria-Segorbe; 42 Km.
ETAPA 5; Segorbe-Barracas; 30 Km.
ETAPA 6; Barracas-Puebla Valverde; 37 Km.
ETAPA 7; Puebla Valverde-Teruel; 27 Km.
ETAPA 8; Teruel-Villarquemado; 25 Km.
ETAPA 9; Villarquemado-Monreal; 26 Km.
ETAPA 10; Monreal-Calamocha; 18 Km.
ETAPA 11; Calamocha-Báguena; 16 Km.
ETAPA 12; Báguena-Daroca; 9 Km.
Desde que se empezó a realizar ha tenido mucha aceptación tanto por los vecinos del municipio, como de los pueblos hermanados y toda la gente que se ha interesado en conocer el recorrido
(prensa, medios de comunicación…).
Webgrafía
LA RUTA DE LOS SAGRADOS CORPORALES DE LLUTXENT (VALENCIA) COMO UNA NUEVA EXPRESIÓN DEL TURISMO RELIGIOSO EN ESPAÑA
Lourdes Lorenzo Prats* Francisca Ramón Fernández** Universidad Politécnica de Valencia – España