Monarcas y la adquisición de reliquias en la Corona de Aragón y otros reinos peninsulares

abril 10, 2023
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La adquisición de reliquias por parte de los monarcas fue una práctica común en la Europa medieval, y la Corona de Aragón no fue la excepción. Estos objetos sagrados eran altamente valorados y considerados como símbolos de poder y devoción. En este artículo, se analizarán los diferentes métodos de adquisición de reliquias por parte de los monarcas de la Corona de Aragón y otros reinos peninsulares, así como el papel que desempeñaron en la política y la sociedad de la época.

  1. Adquisiciones en la Corona de Aragón

1.1 Donaciones

Un ejemplo temprano de la adquisición de reliquias en la Catedral de Valencia fue la donación de una espina de la Corona de Cristo por Luis IX de Francia en 1238. Otros monarcas aragoneses, como Jaime II, Pedro IV y Martín el Humano, también obtuvieron reliquias a través de donaciones, ya sea como resultado de alianzas políticas, intercambios diplomáticos o como recompensas por servicios prestados.

1.2 Compras

Los monarcas aragoneses también adquirieron reliquias mediante la compra, como el cuerpo de una de las Once Mil Vírgenes obtenido de la ciudad de Colonia y el brazo de san Jorge adquirido en la iglesia de Sant Quirze de Pedret. La persistente solicitud de reliquias también resultó en la adquisición del Santo Cáliz por parte del monasterio de San Juan de la Peña.

1.3 Uso de métodos alternativos

En casos donde las solicitudes de reliquias eran rechazadas, los monarcas aragoneses recurrieron a métodos alternativos, como el robo, aunque este tipo de práctica no era exclusiva de la Corona de Aragón.

  1. Donaciones a la nobleza y al clero

Los monarcas aragoneses también recompensaban a nobles y eclesiásticos con reliquias por sus servicios, contribuyendo a fortalecer los lazos políticos y sociales entre la elite gobernante.

  1. Adquisiciones en Castilla y Navarra

La práctica de adquirir reliquias también fue común en los reinos peninsulares de Castilla y Navarra. En Castilla, se conservan varios relicarios ofrendados por la corona entre 1379 y 1454, aunque la falta de documentación hace difícil la identificación de cada uno. En Navarra, se conservan menos piezas pero existe más documentación, destacando el relicario del brazo de san Saturnino en la catedral de Pamplona.

Las reliquias y sus contenedores también tenían un gran valor material, y en muchos casos, formaban parte del Patrimonio Real en la Corona de Aragón. Los relicarios se consideraban objetos de gran valor, junto con las joyas personales y otras piezas ornamentadas. A veces, debido a la falta de liquidez monetaria y el valor intrínseco de los materiales con los que estaban confeccionados, los relicarios se utilizaban para financiar proyectos reales, siendo empeñados o incluso fundidos en casos de necesidad.

Garantía en préstamos con banqueros.

Desde finales del siglo XIII, las joyas de la Corte eran frecuentemente utilizadas como garantía en préstamos con banqueros. A lo largo del periodo bajomedieval, varios eventos llevaron a la pérdida de muchas piezas de orfebrería en la Corona de Aragón, como la guerra con Castilla (la de los Dos Pedros, en el siglo XIV) y las campañas italianas de Alfonso el Magnánimo (alrededor de 1440). En estos casos, los monarcas solicitaban a los templos y catedrales, incluida la de Valencia, que proporcionaran plata de sus alhajas, lo que resultaba en la desaparición de muchas piezas valiosas.

Situaciones similares también ocurrieron en la Corona de Castilla, como cuando Juan II e Isabel I utilizaron el dinero obtenido de empeñar relicarios para financiar sus respectivas campañas militares en 1429 y 1475. En el siglo XIV, Carlos II de Navarra también se vio obligado a fundir objetos de plata de templos, vajillas reales y joyas propias, aunque posteriormente restituyó las cantidades prestadas a sus propietarios mediante concesión de gracias y privilegios.

En otros reinos europeos también existen ejemplos de la utilización de reliquias para obtener recursos financieros. Uno de estos casos involucra al Duque de Berry y su relación con la Corona de Aragón. Antes de su muerte, el duque perdió gran parte de sus objetos más preciados en la derrota del ejército francés ante el inglés en Azincourt (1415). Después de su fallecimiento, algunas de sus piezas fueron fundidas para obtener liquidez con la que financiar tropas. Sin embargo, algunas de sus reliquias fueron salvadas y heredadas por sus hijas, Bonne de Armagnac y María de Borbón. Entre estos objetos se podría haber encontrado el peine relicario de la Virgen conservado en la Catedral de Valencia, que había sido un regalo del duque a Martín el Humano en 1394. Este objeto servía como modelo de opulencia y ostentación de todo lo custodiado en sus dependencias de su castillo de Mehun-sur-Yèvre (Bourges).

En resumen, el valor material de las reliquias y sus contenedores desempeñaba un papel crucial en la política y la economía de la época. Estos objetos sagrados se utilizaban como activos para financiar proyectos reales y otras necesidades, lo que a menudo resultaba en la pérdida de piezas de gran valor histórico y artístico.

Conclusión

La adquisición de reliquias por parte de los monarcas de la Corona de Aragón y otros reinos peninsulares fue una práctica común en la época medieval, y estas reliquias desempeñaron un papel crucial en la política y la sociedad de la época. Los diferentes métodos de adquisición, como donaciones, compras y métodos alternativos, así como la recompensa de nobles y eclesiásticos con reliquias, reflejan la importancia que se les atribuía a estos objetos sagrados. Además, las reliquias representaban momentos concretos de la vida y la Pasión de Cristo y la Virgen, lo que las convertía en símbolos de devoción y poder. En última instancia, el papel de las reliquias en la política y la sociedad medieval evidencia su relevancia en la consolidación de alianzas, la promoción de la devoción religiosa y la afirmación del poder monárquico en la Corona de Aragón y otros reinos peninsulares.

Bibliografía: tesis doctoral titulada «El Patrimonio Artístico y Documental de la Catedral de Valencia. Estudio y catalogación de los bienes muebles y de los documentos históricos conservados». La tesis fue realizada por Ferran García-Oliver en 2019 y se encuentra alojada en el repositorio institucional de la Universidad de Valencia. La tesis presenta un detallado estudio y catalogación de los bienes muebles y de los documentos históricos conservados en la Catedral de Valencia, incluyendo reliquias, obras de arte y otros objetos de valor histórico y artístico.

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