Parte del nuevo eje forma parte de la propuesta ‘Segundo Anillo Ciclista’ emanada de DecidimVLC 2019/2020
El Ayuntamiento va a aprobar entre esta semana y la próxima dos proyectos de carril bici surgidos en las pasadas ediciones de los presupuestos participativos Decidim VLC, ambos en el distrito de Campanar, y que tienen como nexo común el eje de la avenida General Avilés. Los proyectos incluyen también mejoras peatonales, entre las que destaca la bajada a calzada de un tramo de carril bici que actualmente discurre por la mediana sur de la avenida Mestre Rodrigo.
“El recorrido que completarán estos dos proyectos, emanados de los procesos de Decidim València, supera los dos kilómetros de nuevo itinerario seguro para las personas que eligen para sus desplazamientos la bicicleta o los vehículos de movilidad personal”, ha apuntado el concejal de Movilidad Sostenible, Giuseppe Grezzi. “Pero no son solo eso”, ha proseguido, “porque desde Movilidad Sostenible hemos aprovechado esos dos kilómetros de actuación para tratar de corregir una planificación viaria obsoleta, pese a sus pocos años de vida, porque sobredimensionaba el espacio para los coches, subordinando e incluso castigando la movilidad peatonal. Esta actuación, de algún modo, corrige parte de esos errores del pasado”.
El primero de los proyectos comprende el tramo de carril bici de General Avilés que conectará Pío Baroja y Mestre Rodrigo. Un total de 690 metros de conexión ciclista bidireccional, segregada sobre calzada —exceptuando las necesarias conexiones con los carriles bicis existentes en acera— y de 2,30 metros de anchura media.
“Como siempre, el proyecto contempla varias mejoras para la movilidad peatonal”, según ha indicado Grezzi. Por un lado, ampliando los espacios peatonales, especialmente en la intersección entre General Avilés y la calle Terrateig, por pasar el carril bici de acera a calzada en este punto y alinear el paso de peatones reduciendo la longitud del cruce. Además, se proyecta eliminar la semaforización en el acceso y salida de la calle Terrateig dando prioridad con ello al peatón y, en esta misma línea, se prevé la reubicación del paso de peatones de General Avilés junto a la rotonda de la avenida Pío Baroja acercándolo al nuevo cruce ciclista y mejorando el recorrido y la accesibilidad peatonal.
El segundo proyecto, que tiene prevista su aprobación la semana que viene en Junta de Gobierno Local, además de completar el tramo de General Avilés entre Mestre Rodrigo y Pius XII, incluirá en su ámbito de actuación la avenida Corts Valencianes desde la calle Safor hasta General Avilés. En esta avenida se concentrarán en este caso las mejoras peatonales, al recuperar la zona peatonal en la mediana de la avenida Corts Valencianes al bajar a calzada el tramo de carril bici entre las calles Safor y Alacantí. A su vez, el proyecto también realinea y amplía la anchura de los pasos de peatones y de las aceras en la intersección entre la avenida General Avilés y la calle Aparicio Albiñana; aumenta la zona peatonal en la acera suroeste de la intersección entre las avenidas General Avilés y Pius XII; reduce la longitud de cruce en el paso de peatones semaforizado junto a la calle Safor y se bajan a calzada contenedores de residuos y aparcabicis.
Se trata de 1.399 metros de eje ciclista, también segregado sobre calzada, exceptuando las necesarias conexiones con los carriles bici existentes en acera en la calle Safor, mediana de la avenida Corts Valencianes y carriles bici en la intersección de las avenidas Corts Valencianes-General Avilés-Pius XII. Es un eje ciclista bidireccional en su mayoría —en la mediana de la calle Puerto de Santa María será unidireccional— y de 2,30 metros de anchura.
Una vez aprobados los proyectos, el siguiente paso es que salgan a licitación, determinándose en el momento de la adjudicación el importe de la obra. Los proyectos saldrán a licitación con un precio base de 206.477,44 euros, IVA incluido, y un plazo de ejecución estimado de tres meses, en el caso del primero; y un precio base de licitación de 422.351,71 euros, IVA incluido, y un plazo de ejecución estimado de cuatro meses para el segundo.