El Centro del Carmen Cultura Contemporánea incorpora la obra de Julia Mariscal Pájaros-textos-ondas ‘en su exposición’ Fragments que representan el mundo ‘.
Julia Mariscal vive y trabaja en Barcelona. Cursó sus estudios en Inglaterra, donde se graduó en el Goldsmith College, y obtuvo el máster de Bellas Artes en el Chelsea College de Londres.
En su obra se muestra dispositivos con los que se establecen relaciones espaciales complejas, cuidadosos ensamblajes de objetos singulares que combinan la fragilidad del vidrio con la incertidumbre, tanto de las imágenes de sus collages, como de las esculturas o instalación ciones.
Aves-textos-ondas ‘es un ensamblaje de objetos escultóricos, descontextualizados, que se presentan a través del tacto para profundizar en toda la simbología que esconden los materiales y que remiten a lo que está oculto dentro de nuestros cuerpos. En esta performance la piel se convierte en la frontera entre materia y significado, o en espejo / reflejo de la memoria.
Julia Mariscal supone la tercera intervención en el espacio para ‘Fragmentos que representan el mundo’, la segunda exposición del ciclo ‘Totalidad e Infinito (economías de la transferencia en otros tiempos para el arte)’.
Este segundo momento expositivo se plantea como un ciclo de intervenciones progresivas en el espacio, en el que cinco artistas construyen un relato fragmentado cargado de futuro y de presagios.
La exposición se inauguró con la obra del artista alicantina, Rosana Antolí: seis videocreaciones en las que el artista resalta la importancia del gesto en el arte, como espacio de resistencia, el gesto como una representación de la inscripción cultural en el cuerpo.
La propuesta que presenta Antolí para el Centro del Carmen forma parte de su proyecto ‘Virtual Choreographies’ en el que se encuentra trabajando desde 2016, que consiste en un mapeo de gestos del mundo. El artista invitó al público valenciano a participar en su proyecto el pasado mes de febrero, e incorporó los gestos de Valencia, de la misma manera que lo hizo anteriormente en Londres y en Madrid. ‘Virtual Choreographies’ tiene el apoyo del Arebyte Gallery en Londres y el Arts Council England.
Después de Rosana Antolí, en marzo pasado, el artista Gerard Ortín Castellví incorporó su intervención ‘Regulated Wild’. Después de una proyección y una performance en vivo, esta investigación sobre los efectos del ser humano en la naturaleza, se muestran ya en la sala de exposiciones.
‘Regulated Wild’ es un trabajo de investigación que nos guía a través de unas filmaciones realizadas en la provincia de Álava para hacernos reflexionar sobre una circunstancia específica: la drástica reducción de la población de lobos y los efectos que la ausencia de este depredador provocan en un territorio, modos de comportamiento y nuestra relación con la naturaleza. Una manera con la que se descontextualiza y cuestiona la idea de reserva natural que se nutre de otros relatos y elementos para explorar el significado de los límites establecidos en el ser humano a la hora de contrarrestar su incidencia sobre los entornos naturales.
El director del Centro del Carmen, José Luis Pérez Pont ha manifestado que «esta exposición rompe con el modelo tradicional, y funciona como un dispositivo artístico que acciona nuevas maneras de aproximarnos a la creación contemporánea, para fomentar el diálogo entre los artistas y el público «.
Totalidad e infinito
‘Totalidad e infinito’ es un proyecto de investigación curatorial que plantea la idea de exposición artística como un gran acto de transferencia, un espacio en el que el arte, los sujetos y las cosas se comprometen a intercambiar experiencias en una zona de ‘sentiència’. Con este concepto se estructura una programación expositiva que pretende reflexionar sobre el mundo que configura nuestra realidad, para llegar a la conclusión de que todo lo humano que hay en éste se puede distorsionar, cuestionar e incluso desarticular hasta el infinito.
‘Totalidad e infinito’ es el resultado de la convocatoria pública ‘365 días VLC’ que selecciona un proyecto de comisariado para la Sala Carlos Pérez del Centro del Carmen, durante un año.